Más de lo mismo.

Ya la vida de Tristelme, tal su edad, deja de dar novedades para repetirse y copiarse de sí misma día a día.

1. Boca se entrena en Casa Amarilla pero Tristelme, acompañado de su hermano Viatri, está recluído en el gimnasio. El ladrón de tijeras sufre una distensión en el soleo izquierdo, con mucho olor a desgarro y Tristelme nada, está cansado: jugó 90 minutos ¿qué querés? Boca perdió pero ¿viste?

2. No fuimos los únicos que tuvimos que escuchar las notas dadas por Tristelme durante su letargo con goce de sueldo en las que aseguraba que "nunca me cuidé tanto una lesión como ahora" o "quiero volver al 100%" ¿recuerdan?

Bueno, pasada una fecha (derrota) de su retorno, volvió a una de sus frases paraguísticas de cabecera: "NO LLEGO AL 100% CON RIVER".

3. Más allá de los malos resultados y el desgaste, el Bichi no llegaría a fin de campeonato porque no puede lidiar con el clima interno.

La gota que rebasó el vaso de la paciencia del Bichi fue, según indica el diario Crónica, que Friomán y los bobitos oscuros de su camarilla, es decir, Javier García, Matías Giménez y Lucas Viatri, estuvieron en el autódromo Oscar Gálvez el pasado viernes. Eso molestó al Bichi y él mismo lo hizo saber en declaraciones radiales.

“En realidad dije que no hay problema con que vayan y vengan, la cagada fue que se subieron a los autos”, graficó el Bichi en declaraciones a La Red. Además, reconoció que “A veces hay jugadores que piden permiso para salir por problemas personales, y no se los dan”, tiró.

¿Tomó partido en la interna Palermo-Riquelme? No, pero nadie asegura en Boca que sus dichos no sean vistos de esa manera. Incluso, el Bichi preguntó en los pasados días si el hecho que él llegara tarde a los asados le molestaba al plantel. Sí, es real.

También es real que Borghi sufre en carne propia esa interna a la hora de armar el equipo. El sabe que Lucas Viatri y Martín Palermo no deberían jugar más juntos, en función del equipo, pero sacar al Titán o a Lucas es tomar partido en la interna, porque el ladrón de tijeras es un bobito tristelmista.

Por eso el Bichi no saca a ninguno y sí, en cambio, saca a Giménez. Y ojo, porque hasta el ex Tigre se le enoja. Claro, Borghi estaba en el palco y no en el banco, por eso, cuando terminó el juego, preguntó si eso era verdad.

Borghi está cansado, exhausto del Mundo Boca. De ser centro de todas las miradas, para bien o para mal y de esa bendita interna. Por eso, baja línea: “el partido del martes será determinante”.